sábado, 31 de octubre de 2009

Mi paseo diario

Cuando dejo atrás el portal de mis materialidades, todavía tengo que caminar un rato, que se me hace eterno, por el duro espesor asfáltico de negrura deletérea que ahoga la vida.
Como un corredor de fondo al divisar la meta apuro el paso, no para terminar sino para empezar mi sereno recorrido.

Y entro en ese bar en el que ella siempre está.

Ese paso entre la dureza y su blandura es traspasar el espejo hacia el mundo de nunca jamás, es atracar en un puerto que se me olvida que ya he visitado, porque quiero hacerlo cada vez con ese gesto de sorpresa y admiración que sólo se tiene la primera vez.

Lugar de tenues sombras, dulces olores, en donde los sentimientos desembarcan en los corazones que los quieran escuchar.

Y ella está allí sentada, bajo una dulce oscuridad que te acaricia al entrar.
Observa el vaho de su café, y su vapor dibuja caracoles para rozar su belleza.
Sus mejillas tienen ese tenue color carmín de naturaleza virgen, esa pincelada al agua de rojizo brillo en el lienzo de su piel blanca.
Su pelo oscuro, prendido por una diadema de sueños, levemente se escapa de ese yugo para cubrir con temor sus hombros, y se siente tan libre como los pensamientos que siguen flotando en esa taza de esperanzas.

Me quedo un rato observándola de lejos, queriendo pensar sus pensamientos, queriendo retratarla en mi mente, un nuevo cuadro con la misma inspiración.
Y su estrella me atrae con la fuerza de mil soles, y me hechiza su universo de pálidos y sutiles cometas.

Pero mis pesadas cadenas han echado raíces fuera de esa belleza infinita, y se confunden con la tierra por la que camino, y a cada paso que doy se abre el suelo para atraparme por los tobillos y que ni siquiera pueda coger impulso.

Son cadenas hechas de hielo y de fuego, dos elementos, porque esas son las que no puedes romper. Si quiebras una parte, la otra se disuelve entre tus dedos.

Mi único consuelo es que siempre podré repetir mi paseo diario, ese observar de lejos su perfección inalcanzable, la contemplación de su hermosura sin límites.

El Sitio de mi Recreo (Antonio Vega)

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13 comentarios:

  1. Esas cadenas de hielo y fuego se pueden quebrar con el deseo sincero e inquebrantable de nuestra voluntad para alcanzar esa estrella que se hace algo etérea, quizás, por nuestra falta de decisión.
    Con mi deseo de alejar de nosotros esas dudas, esos miedos, esa falta de empuje decisivo, recibe un fuerte abrazo.

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  2. Te leo por primera vez,creo,sin duda me llenaste de imagenes,olores y una agradable sensacion.
    Buen texto!.

    Menta

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  3. Crivevi, hay muchos tipos de cadenas.
    Cadenas de indecisión, de miedo, de duda.
    Estas, como muy bien dices, con un buen empujón, con un día de coraje, se pueden romper.

    Sin embargo, hay otras mas complicadas.
    Son las que están compuestas de dos materiales, y no quieres, no puedes, quedarte sin uno de ellos.
    Hay veces que estas cadenas dobles, si las rompes, te quedas sin nada.
    Este es el caso.

    Un abrazo y muchas gracias por tus palabras.

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  4. Mentacalida, muchas gracias por tus palabras.

    Te debo una visita por cada uno de tus tres blogs.

    Un saludo.

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  5. La Fe rompe cualquier cadena que el hombre no se atreva a romper. Pero sólo cuando esas cadenas son de tortura.
    Muy buena entrada.
    Saludos!

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  6. Embelesada me he quedado leyéndote... bonitas palabras que reflejan sin duda, la realidad a la que en ocasiones nos vemos sometidos esa especie que llamamos humanos. Cuando romper cadenas supone caer al vacío, naufragar hacia la más terrible oscuridad de la nada... es entonces imposible romperlas, quizás aprender a vivir con ellas sin que nos asfíxie, sea la mejor opción. Un beso de agua

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  7. Sublime, trastocador y con toques de contradictorio... Me brinda expectativas, por una parte: es alentador el tener un lugar al cual acudir, pero más un quién... que ofrezca posibilidad de algo valioso, puede que hasta invaluable...
    El sin embargo se instala en la sensación de lo duro y humano que resulta sujetarse a cadenas agobiantes que parecen inquebrantables...instalarse en un limbo...
    La voluntad y la esperanza rompen eso yugos con el tiempo... y no te dejan hueco, al contario crean un espacio nuevo para llenarlo de nuevas vivencias.
    Un gran beso.

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  8. Silvia Beatriz, qué gusto verte por aquí.

    Tienes razón, cuando son cadenas de tortura la fe en algo o alguien puede romper esa cadena.
    Pero hay cadenas de tortura que te unen de forma inseparable a otras cadenas de vida.

    ¿Qué hacer en estos casos? Difícil solución.

    Un beso.

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  9. Agua, siempre que vienes dejas por aquí un vasito de agua fresca.

    Es verdad que hay cadenas que, al romperlas, se te va una parte de lo poco bueno que tienes en la vida.

    Un beso.

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  10. Etarinyeth, en cierto modo es así.

    Por una parte está ese paseo, que necesito diario, a un lugar lleno de sentimientos. Un lugar que creo ya parte de mí.
    Por otra parte están esos yugos que no puedo romper. En la vida hay situaciones diversas, y cada uno las afronta de una forma distinta. Que sea un error la solución dada solamente depende de uno mismo y del impredecible futuro.
    Hay dulces cadenas que te sujetan a la vida, y amargas cadenas que te oprimen hasta la muerte.
    Cuando la necesidad por la primera depende totalmente de la esclavitud por la segunda, se produce la paradoja de que no puedes romper la cadena que te asfixia porque también perderías a la otra, también perderías la vida.
    Y, aún intuyendo que existe otra vida encantadora, fascinante y plena, me ata a la vida una pequeña y dulce cadena, y me ata a esta un mortificador yugo, que no puedo deshacer.

    Es por esto por lo que no puedo deshacerme de mi imperfecta vida, y que siempre me tendré que quedar en la barra de ese pensado bar en el que centro mi paseo diario, solamente contemplando la belleza, solamente visitando su delicada perfección.

    Un beso.

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  11. siempre es algo especial leerte Jesús y es que me haces sentir lo que plasmas aqui.

    Difícil situación ..... aunque soy de las de romper cadenas sean como sean, pero tienes razón a veces las consecuencias no pueden ser tan placenteras

    Un beso lleno de sonrisas

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  12. Ufff43, gracias por tus palabras, y por ser un alma tan sensible.

    A veces tienes las manos atadas, y no puedes tomar la solución deseada.

    Un beso.

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  13. respecto con lo de mi blog... gracias. supongo que si, algun dia tenia que crecer un poquitito. jaja
    besotes.

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